Una quinta cirugía, la última apuesta de Kenia Suárez para dejar de sentir dolor
La ex atleta requiere recursos para pagar una operación que le dé mejor calidad de vida
HERMOSILLO, Sonora (José Francisco Arredondo/BIP).- Kenia Suárez solía correr por las pistas de atletismo, pero una lesión en su espalda baja sufrida en 2013 le impidió moverse libremente. Ahora, requiere la ayuda de los sonorenses para costear una quinta y última cirugía.
Kenia Irlanda (30 años; Jiquilpan, Michoacán) inició en el deporte a los siete años gracias a la influencia de su padre, Cuauhtémoc Suárez. Ella se especializó en la prueba de 800 metros, prueba en la que ganó medalla de plata en la Olimpiada Nacional 2001.
De la mano de entrenadores como Alejandro Salvador, Martín Pitayo y Raúl Barrera, este último mentor de la velocista sonorense Ana Gabriela Guevara, dominó las distancias de mil 200 metros, donde ganó dos oros e impuso récord mexicano con un tiempo de 3:43.95 minutos en la Olimpiada Nacional 2003.
Con su esfuerzo, superó a la tapatía Patricia Luna que había cronometrado 3:48.06 minutos un año antes.
También tuvo conquistas internacionales, ya que en el 2004 se adueñó del metal de bronce al registrar un tiempo de 2:18.39 minutos en los 800 metros en el Campeonato Centroamericano Junior realizado en Coatzacoalcos, Veracruz.
Toda trayectoria deportiva está destinada a terminar, pero la de Kenia tuvo un final prematuro. La michoacana asistió a Hermosillo para afrontar la Universiada Regional 2013 y fue en el estadio “Héroe de Nacozari” cuando terminó la prueba de 800 metros, que sintió un dolor que todavía persiste.
El diagnóstico fue de dos hernias en la parte inferior de su espalda, y aunque había esperanza de recuperarse, fue durante sus vacaciones en Michoacán cuando se agravó la lesión a tal grado que dejó de sentir sus piernas.
“No sé en qué momento mi cuerpo reaccionó mal, si fue algún movimiento que hice mal, pero estando en Michoacán estuve internada un mes y medio hasta que me dicen que una de las vértebras se estaba saliendo de la columna y tenía que operarme”, recordó.
Su vida deportiva ‘cayó a pedazos’
Así el lunes 23 de septiembre de 2013, Kenia fue trasladada a Guadalajara, Jalisco, donde se realizó la primera de cuatro cirugías a las que ha sido intervenida. En aquella ocasión le fueron colocaron tornillos, barras y espaciadores.
“Era una molestia tolerable (antes de la competencia en Hermosillo), como deportista todos los días te duele algo y yo lo relacionaba con el cansancio, estrés o nervios, jamás imaginé que algo se estaba desarrollando ahí dentro que me fuera a lastimar.
“Mi vida deportiva se frustró, se cayó a pedazos. Tenía un proyecto edificado, me veía en Juegos Olímpicos, juraba que iba a ser campeona. Era una persona muy alegre, me encantaba bailar, montar a caballo, era imposible estar quieta y ahora no hay manera que esté de pie”, lamentó.
La propia Kenia lo afirma. Desde hace siete años vive un calvario en el que lidia diariamente con un dolor intenso, y aunque está consciente que su problema no tiene cura, va a apostar todo a una última intervención quirúrgica que le reduciría el dolor en un 50 a 80%.
En junio pasado, el doctor Carlos Rodríguez le recomendó a la ex atleta la posibilidad de implantar un neuroestimulador de cordón epidural que en apariencia es como una caja conectada a las vértebras dañadas y liberará energía para aliviar las molestias.
Esta cirugía tiene un costo de $600 mil pesos mexicanos, de los cuales ya tienen recaudados 300 mil y para costear los gastos, Kenia realiza una rifa de treinta mil pesos que se llevará a cabo el domingo 25 de octubre y cuyo boleto tiene un precio de $200 pesos.
“Esto no me cura, me va a bajar el dolor que es lo que me tiene mal, ya sé que no me voy a curar, ya lo acepté, pero quiero tener una mejor vida, regresar a ser un poquito más sonriente, era otra Kenia.
“Todo este tiempo he estado medicada y las dosis han aumentado, estoy en un grado en que son parches muy fuertes, son medicamentos que te hacen adicto y no me gusta ser dependiente porque me da ansiedad, entro en depresión, es todo un tema”; explicó.
La “Kenia de antes” no logró la gloria deportiva, pero es momento de dar paso a la “Kenia del futuro”, que lo único que añora es poder vivir una rutina normal que le permita disfrutar la vida junto a su esposo y su hijo.
“Tengo la familia que siempre quise, al marido que siempre busqué, un hijo maravilloso, quiero convivir con ellos, quiero levantarme de la cama, bajar a comer, quiero tener una vida un poquito más normal”, deseó.
° RIFA EN BENEFICIO DE KENIA IRLANDA SUÁREZ TORRES
Premio: $30 mil pesos
Fecha: Domingo 25 de octubre
Costo boleto: $200 pesos
Contacto: 6621-46-29-75 (Edson Valencia)
° PARA APORTACIONES VOLUNTARIAS
Banco Santander (Débito)
Nombre: Edson Valencia Murrieta
Número de tarjeta: 5579 1002 4580 1764
° PARA TRANSFERENCIA BANCARIA
Número de cuenta: 56-67263889-3
CLABE: 014760566726388931
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