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Los niños ucranianos y ‘Chicharito’ Hernández

GRADA NORTE

José Luis Sibaja

HERMOSILLO, Sonora.- Es sábado 9 de septiembre del 2023, son las 7:05 de la mañana en Kyiv y abordo el tren 191 que me llevará de la capital de Ucrania a Lviv, la ciudad más al oeste del país, desde donde tomaré un camión en dirección a Varsovia, Polonia, para iniciar mi largo regreso a México después de un par de semanas de cobertura de la guerra.

Subo al vagón número 6 y me dirijo a mi asiento, el número 31. Llego al camarote donde se ubica mi lugar y veo que está lleno por unos ocho o nueve niños. Me ven con curiosidad, saben que soy extranjero. Ríen entre sí, no sé qué dicen de mí, pero evidentemente se refieren a ese extraño con maleta y mochila que los saluda en inglés.

Como pude acomodé mi maleta debajo de los asientos de uno de los costados, me siento y casi de inmediato empiezan a tratar de platicar conmigo. Se divierten, no me queda más que reír con ellos, aun cuando muy probablemente se ríen de mí. De pronto se asoma un adulto, habla con ellos brevemente y se dirige al siguiente camarote por el angosto pasillo.

Pronto los niños empezaron con el interrogatorio, es una plática “random” en inglés, hasta que uno de ellos me preguntó a qué me dedico y les explico que soy periodista mexicano. ¡Se rompe el hielo! Uno de ellos se para en medio del camarote y empieza a bailar y cantar: “Chicharito, Chicharito”, todos reímos, y ¡claro, todos sabemos que se refiere a Javier Hernández!

Este grupo de niños, ya platicando con ellos, resultó que era un equipo de futbol que iba de Kyiv a un poblado ubicado entre la capital ucraniana y Lviv para jugar un partido. El adulto que iba de camarote en camarote era su entrenador y todos nos comunicábamos por el idioma llamado futbol.

Emocionado, rápidamente uno de los niños “googleó” una foto de “Chicharito” vestido con el uniforme del Real Madrid, y sí, todos volvieron a bailar y cantar “Chicharito, Chicharito” entre risas. Por curiosidad les pregunté sobre Guillermo Ochoa, y sí lo ubicaban, principalmente por el Mundial de Catar 2022 (eran muy chicos para verlo jugar en los mundiales anteriores).

Les platiqué de Rafael Márquez y ahora fui yo quien les mostró una foto “googleada” con el uniforme de Barcelona, y uno o dos de los niños sí lo ubicaban, pero no les tocó verlo jugar.

Curiosamente, por tratarse de un tema generacional, sabían poco o nada de Hugo Sánchez. Confieso, eso me desconsoló un poco, él fue mi ídolo en mi infancia y adolescencia, y se entiende, hoy son otros los ídolos de los niños, sin embargo, también en Ucrania, hay otra historia sobre “Hugol” que en otro momento les compartiré.

El punto es que finalmente es innegable que el futbol es universal y “Chicharito” es un futbolista universal, y eso, nadie lo puede negar. Así como lo fue Hugo Sánchez, en los años ochenta del siglo pasado; luego Rafael Márquez, en la primera década del nuevo milenio; en los últimos quince años, Javier Hernández es el máximo referente del futbol mexicano en el mundo.

Camarotes del tren 191 de Kyiv a Lviv, Ucrania

La universalidad de los futbolistas mexicanos

En ese entorno de guerra en Ucrania, me era inevitable recordar esa historia en la que, en la guerra en la ex Yugoslavia, dos periodistas mexicanos fueron “interceptados” por un grupo de soldados y sus vidas corrían peligro al ver que los militares los estaban confundiendo con espías enemigos.

Esta historia fue retomada por el escritor Eduardo Galeano en su libro “El futbol a sol y sombra”, que relata: “Entonces a los condenados se les ocurrió mostrar sus pasaportes. Y el rostro del oficial se le iluminó. ‘¡México!’ – gritó – ‘Hugo Sánchez’. Y dejó caer el arma y los abrazó”. ¡Así de universal es también “Hugol”!

Hoy, con el regreso de Javier Hernández al futbol mexicano, no había mejor momento para dimensionar, fuera de las canchas, el impacto y trascendencia de “Chicharito” en muchos de los rincones más escondidos del mundo, y como ven, no me fue necesario mencionar los equipos donde jugó ni los récords que posee, por sí mismo Javier Hernández es una leyenda.

Hablamos de un futbolista, que nos podrá caer bien o mal, y que más allá de las polémicas que le puedan rodear, ha sido ídolo, inspiración, ejemplo y referente para miles de niños, en países donde reina la paz, así como en los que la tragedia de la guerra ha permeado a prácticamente toda la población de un país, en este caso Ucrania.

Ahora que “Chicharito” regresa al futbol mexicano, aprovechemos para mencionar a otro de los grandes jugadores mexicanos que igual vuelve a la liga que lo vio nacer: Andrés Guardado, si bien menos mediático, es un futbolista ejemplar, de carrera impecable y, a mi gusto, entre los cinco futbolistas mexicanos más importantes de la historia.

En fin, han pasado algunos meses de ese divertido encuentro en el tren con esos niños futbolistas (por cierto, todos al llegar a su destino se despidieron muy sonrientes con apretón de mano, como al final de un partido), sin embargo, confío que el futbol y sus ídolos, (como “Chicharito”) les estén dando ahora mismo alegrías y motivos para olvidar (al menos durante noventa minutos) una guerra que comenzó hace casi dos años y que no se le vi un pronto final.

José Luis Sibaja: Director GRADA NORTE. Experiencia de 27 años en el Periodismo. Coberturas internacionales: 4 Juegos Olímpicos; 2 Copas del Mundo de Futbol; 3 Campeonatos Mundiales de Atletismo; 6 Juegos Panamericanos; y corresponsal de guerra en Ucrania.

Twitter: @jlsibaja

Boleto de tren de Kyiv a Lviv, Ucrania.

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