Serie: “EZLN, 30 años. De su incursión armada, al eco de su recuerdo”. Entrega 2 de 5.

HERMOSILLO, Sonora (José Luis Sibaja/GRADA NORTE).- La sorpresiva incursión armada del EZLN sacudió al país hace treinta años, el movimiento sacudió los cimientos políticos, sociales y económicos de México, pero el paso del tiempo desgastó su fuerza y ahora se encuentra en peligro de extinción, explicó Agustín Rodríguez Céspedes.

A tres décadas de la incursión armada del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), gestada el 1 de enero de 1994 en Chiapas, Agustín Rodríguez Céspedes, periodista de Fuerza Informativa Azteca, analizó el escenario nacional e internacional.

Así mismo, abundó sobre el impacto y las consecuencias de la rebelión del movimiento indígena que irrumpió violentamente para cambiar el rumbo político, social y económico de México.

El periodista con 29 años de experiencia, compartió los primeros recuerdos que tuvo al saber sobre el levantamiento armado en Chiapas y cómo lo experimentó laboralmente en esos días, en que apenas iniciaba su camino como reportero.

“Recuerdo que estábamos en los festejos del Año Nuevo, primero se escuchaban muchos rumores. Nadie sabía realmente lo que estaba pasando, las primeras noticias que llegaban cuando encendías la televisión eran de que un grupo armado había tomado algunos poblados en Chiapas.

“Habían noticias mucho muy confusas, unos decían que había terroristas que habían tomado algunos poblados en Chiapas, otros decían que eran delincuentes. En ese entonces ya laboraba en Televisión Azteca, al día siguiente fui a ver lo que sucedía y ya confirmando los datos, había un grupo armado y lo que llamó la atención que eran indígenas”, relató.

Llegaba poca información a redacciones

En ese momento, dijo, la información fluía a cuentagotas y estaban a espera de los faxes con información enviados por los corresponsales en Chiapas, de esa forma se forma se dio a conocer que el Ejército Mexicano ya había intervenido para sofocar el levantamiento armado.

Entre las primeras imágenes que llegaron a Televisión Azteca en la Ciudad de México, platicó, eran las de un mercado en San Cristóbal de las Casas, donde se veía gente armada y personas en el suelo entre para protegerse de las balas y algunos que resultaron heridos por los enfrentamientos.

“La labor fue ardua, empezamos todos a trabajar, cada quien en lo suyo. Yo en ese entonces era asistente de producción y hacía mis ‘pininos’ como reportero. Era una locura, todos los jefes de información en juntas todo el día, tratando de ver qué era lo que sucedía y qué era lo que se podía informar o no.

“Hay que mencionarlo, en aquel entonces el cerco informativo por parte del Gobierno Federal era muy fuerte, no es como ahora. Se comenzaron a enviar a los primeros equipos, mi compañero Samuel Prieto fue de los primeros que llegaron como enviados especiales desde la Ciudad de México, fueron días de no dormir, porque no se sabía qué podía pasar”, relató.

El impacto del levantamiento armado en Chiapas, continuó, provocó una psicosis generalizada ante posibles actos de terrorismo, esa sensación fue tanto en las autoridades como en la ciudadanía.

ENTREVISTA COMPLETA CON AGUSTÍN RODRÍGUEZ, PERIODISTA DE FUERZA INFORMATIVA AZTECA, SOBRE LA INCURSIÓN ARMADA DEL EZLN EN CHIAPAS EL 1 DE ENERO DE 1994.

Aparición del zapatismo crea incertidumbre política

El escenario político y económico de México a finales de 1993 y principios de 1994, opinó, llegó en un momento en el que el país tenía la esperanza de alcanzar un desarrollo que lo ubicara en el llamado “Primer Mundo” a través del Tratado de Libre Comercio (TLC) junto con Canadá y Estados Unidos.

No obstante, señaló, el levantamiento armado del EZLN dejó en evidencia las grandes desigualdades que existían en el sur del país y con las comunidades indígenas en temas económicos y sociales principalmente.

“Veníamos de un gobierno del PRI, con Carlos Salinas de Gortari, que nos había prometido que íbamos a pasar al Primer Mundo, parecía que así era, había un ánimo generalizado en la ciudadanía, sin embargo, cuando se da el asunto (incursión del EZLN) parece que se nos vino la realidad encima.

“Parece que no todo lo que se nos había dicho era cierto y entonces la gente comenzó a tener esa zozobra de qué es lo que estaba pasando, las cosas comenzaron a tener otro matiz y que no todo era color de rosa, ni cristalino, y que había partes de México que no estaban a la misma velocidad (en relación al norte del país)”, abundó.

Los violentos hechos en el sureste del país, indicó, provocaron cierta preocupación o miedo por la incertidumbre de los acontecimientos, no solo en los empresarios mexicanos, sino también en Estados Unidos y Canadá, países miembros del naciente TLC en 1994.

Lo mismo sucedió con la incursión del Subcomandante Marcos, un personaje carismático, con mucha preparación, que sabía “ganarse a la gente” y que por lo mismo había llamado la atención mediática de la época, que en algún momento cedió su lugar a dirigentes de origen indígena como voceros del movimiento.

Con el paso de los años, concluyó, el EZLN ha entrado en una etapa en la que se desvanece poco a poco, quizá por un desgaste entre sus integrantes, pero, además, por culpa del crimen organizado en Chiapas.