Historia

Suiza 1954, el comienzo de una era

Era una decisión predecible durante el Congreso celebrado en Luxemburgo en 1946, considerando que la Copa del Mundo le correspondía organizarla a Europa y que en la ciudad suiza de Zurich se encontraba la sede de la FIFA.

Pero también fue determinante el hecho de que todavía ningún país europeo había superado los estragos de la Segunda Guerra Mundial y únicamente Suiza gozaba de una situación favorable al mantenerse neutral durante el conflicto bélico.

Estos argumentos influyeron para que la nación helvética albergara una competencia de la que se esperaba un gran espectáculo futbolístico y una reconciliación con Alemania y Japón, países que por provocar el Holocausto fueron excluidos, pero que a partir de esta fase final podrían volver a participar en las eliminatorias mundialistas.

Si bien los participantes se encontraban contentos con los escenarios donde se jugarían los partidos, manifestaron su molestia al conocer el sistema de competencia de la primera fase del certamen.

El esquema era el mismo del mundial pasado, formar grupos con cuatro equipos cada uno, pero en esta ocasión con dos “cabezas de serie” en cada sector que no se enfrentarían entre sí, por lo que cada conjunto solamente jugó dos partidos perjudicando a las selecciones que no contaban con ese privilegio.

En el aspecto tecnológico, el Campeonato Mundial Suiza ’54 fue el primero en el que se observó un partido televisado, cuando el 16 de junio Yugoslavia derrotó a Francia 1-0 en el juego inaugural, con lo que también comenzaba la era comercial en el futbol.

Por medio de la televisión millones de personas atestiguaron grandes momentos, como el encuentro en que Austria derrotó a Suiza 7-5, históricamente el duelo mundialista con más goles anotados, y de igual manera se deleitaron con los 17 tantos que marcó Hungría en apenas dos juegos.

En lo futbolístico, la primera ronda se desarrolló como se esperaba, con los húngaros demostrando porqué eran los claros favoritos para coronarse con una poderosa selección encabezada por Ferenc Puskas, Sandor Kocsis y Nandor Hidegkuti.

En otros frentes, Alemania volvía a las justas mundialistas con una victoria sobre Turquía 4-1, en cotejo en el que el delantero teutón Max Morlock anotó el gol 400 en Campeonatos Mundiales, pero posteriormente perdió escandalosamente 3-8 frente a la “Magia Magiar” del técnico húngaro Gusztav Sebes.


Mala actuación de México
La Selección Mexicana, dirigida por Antonio López, tuvo otra decepcionante actuación al perder con Brasil 5-0 y con Francia 3-2, para ubicarse en el sótano del Grupo 1.

Los cuartos de final se caracterizaron por una intensa lucha en la cancha llena de pasión en algunos casos mal encauzada, que provocó verdaderas peleas callejeras, que lamentablemente se observaron durante las transmisiones por televisión.

Quizá la más famosa sea la “Batalla de Berna” protagonizada por Brasil y Hungría y que el escritor inglés David Yallop recuerda así: “Hubo riñas entre los equipos, la policía, los aficionados, fotógrafos y delegados de los equipos.

“La Selección Brasileña invadió el camerino húngaro. El Comité Disciplinario que presenció el partido no impuso sanciones. La FIFA actuó como si no hubiera visto nada. Finalmente el marcador, por si a alguien le interesa, quedó 4-2 favor a Hungría”.

No deja de ser anecdótica la queja que Brasil interpuso ante la FIFA por este incidente, al acusar al árbitro inglés Arthur Ellis de actuar “al servicio del comunismo internacional contra la civilización occidental y cristiana”.

Este duelo dejó secuelas en ambos conjuntos, Brasil fue eliminado y regresó a casa con todo y su recién estrenado uniforme amarillo con cuello verde y pantaloncillo azul, mientras Hungría sufrió un gran desgaste físico que se acentuó más después de enfrentar a Uruguay en la semifinal en otro épico encuentro.

Magiares y charrúas respondiendo a las expectativas creadas en torno a ambas potencias con un partido memorable, en el que los húngaros superaron a los campeones vigentes 4-2 con par de goles de Kocsis en tiempos extras.

Pero tanto esfuerzo físico y mental trajo sus consecuencias y Hungría debía enfrentar a Alemania en la final con Puskas lesionado y con la presión de mantener el invicto de 32 partidos, racha que había iniciado en mayo de 1950 y que pretendían prolongar consolidándose como monarcas del orbe.

A diferencia del primer enfrentamiento entre ambos semanas atrás, Alemania inició el partido con sus mejores hombres y tuvo la capacidad para reponerse de dos goles en contra recibidos en los primeros nueve minutos.


Morlock descontó inmediatamente y Helmut Rahn empató poco después para igualar las acciones de un duelo que se desarrolló a gran ritmo y bajo una constante lluvia.

La difícil condición climática dificultó el juego, pero que no influyó al guardameta teutón Toni Turek, quien evitó la caída de su marco en varias ocasiones, contando también con la suerte a su favor al ver tres balones estrellarse en los postes.

Faltando seis minutos para concluir el tiempo regular, Fritz Walter recuperó el esférico en medio campo, desbordó y sirvió a Rahn, quien cerrando la punta remató el balón para enviarlo a las redes superando la estirada del portero Gyula Grosics.

Con el gol en contra, Hungría todavía tuvo una última oportunidad de emparejar, pero la anotación conseguida por Puskas fue anulada por el árbitro inglés William Ling, para agregar más dramatismo a una final ganada con justicia por Alemania.

En gran parte el triunfo teutón se atribuye a la inteligencia de su técnico Sepp Herberger para aplicar en cada partido la estrategia correcta de acuerdo al rival en turno.

En la estadística de la quinta edición mundialista quedó la presencia de dos hermanos disputando una final, los teutones Fritz y Ottmar Walter; también se recuerda al checo de 30 años Jaroslav Cejp, tercer entrenador más joven en estas competencias y al francés Gaston Barreau, el técnico de más edad con 70 años.

– Partido final
Alemania 3-2 Hungría
Max Morlock 11’ Ferenc Puskas 6’
Helmut Rahn 20’ y 84’ Zoltan Czibor 9’
4 de julio, estadio “Wankdorf”, Berna, Suiza
60 mil aficionados; 17:00 horas
Árbitro: William Ling (Inglaterra)

– Cifras finales
Se desarrolló del 16 de junio al 4 de julio de 1954
Participaron 16 países (tres americanos, doce europeos y un asiático)
Se anotaron 140 goles
Se jugaron 26 partidos
Promedio de 5.38 goles por partido
Se anotaron siete goles por tiro penal
Se expulsaron a tres jugadores
Participaron 16 árbitros de quince países

– Mejores anotadores
Jugador/País Goles
Sandor Kocsis/Hungría 11
Josef Hügi/Suiza 6
Max Morlock/Alemania 6
Erich Probst/Austria 6

– Equipo ideal
Gyula Grocsis (Hungría) Portero
José Santamaría (Uruguay) Defensa
Obdulio Varela (Uruguay) Defensa
Werner Liebrich (Alemania) Defensa
Víctor Rodríguez (Uruguay) Defensa
Jozsef Bozsik (Hungría) Medio
Helmut Rahn (Alemania) Medio
Zoltan Czibor (Hungría) Medio
Nandor Hidegkuti (Hungría) Delantero
Ferenc Puskas (Hungría) Delantero
Sandor Kocsis (Hungría) Delantero
Sepp Herberger (Alemania) Entrenador

– La figura
Sandor Kocsis (30 septiembre 1929)
Lugar de nacimiento: Hungría
Equipos: Ferencvaros, Honved, Young Fellows y Barcelona

– Actuación mexicana
16 junio Brasil 5-0 México
19 junio Francia 3-2 México (José Luis Lamadrid 54’ y Tomás Balcázar 85’)

– Para recordar
° Desde 1952, Hungría comenzó a poner en práctica el sistema de juego 4-2-4 con el que conquistó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Helsinki ese año, para luego alcanzar el subcampeonato en la Copa del Mundo Suiza ’54.

° Con algunas modificaciones en su aplicación, brasileños y húngaros adoptaron este sistema pero cada uno a su estilo. El representativo magiar utilizó dos extremos rápidos y par de interiores para acompañar el ataque, con dos medios repartiendo el juego.

° En el aspecto ofensivo, Nandor Hidegkuti, a diferencia de los centros delanteros de la época, realizaba movimientos para abrir espacios y jalar marcas. En sector defensivo, Hungría agregó otro defensa echando para atrás a un mediocampista.

– Histórico
° Personajes y hechos
Presidente de México: Adolfo Ruiz Cortines
Premio Nobel de la Paz: Alto Comisionado Naciones Unidas para Refugiados (ONU)
Premio Nobel de Literatura: Ernest Hemingway (Estados Unidos)
Óscar mejor película: “On the Waterfront”, dirigida por Elia Kazan
En 1954 nacieron figuras como el creador de la serie “Los Simpson”, Matt Groening; el actor estadounidense Denzel Washington y la cantante escocesa Annie Lennox. Falleció el pintor francés Henri Matisse

° Así estaba el mundo
– 1 de marzo
En el atolón de Eniwetock, en las Islas Marshall en el Océano Pacífico, Estados Unidos probó la “Bomba H”, equivalente a 600 bombas atómicas como la lanzada en Hiroshima.
-7 de mayo
El ejército vietnamita comandado por el General Giap, derrotó a las tropas francesas en Dien Bien Phu.
– 27 de junio
El presidente guatemalteco Jacobo Arbenz Guzmán fue derrocado en un golpe de Estado promovido por Estados Unidos en represalia por las nacionalizaciones que realizó su gobierno democráticamente electo.
– 13 de julio
La pintora e intelectual mexicana Frida Kahlo falleció en su casa de Coyoacán, en la Ciudad de México a siete días de cumplir 47 años.
– 24 de agosto
El presidente brasileño Getulio Vargas, que buscaba reelegirse como mandatario en medio de una crisis económica y social, se suicidó a los 71 años al no soportar la presión ejercida por militares y empresarios.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticias relacionadas