Columna

Identidad sonorense

 

Comenzó la charla y el gran Pirraco, con voz firme nos dijo: “El primer juego de futbol, aquí en Hermosillo se jugó en la 5 de Mayo. Cuenta la leyenda que ese partido histórico se desarrolló enfrente de la Fábrica de Textiles, entre soldados y ‘raza’ de aquí, el resultado no lo sé”.

 

Chalío sacó unos apuntes y empezó a leer: “Los precursores de ese gran deporte fueron Don Pedro Sánchez, Odilón Báez, entrenadores como Pedro Galindo, ‘El Chivo’ Guerrero, pura gente del Sur, algunos de la capital”.

 

El “Inge Abicinio” nos ilustró y recordó lugares donde se jugó futbol, como los campos de la Unison, la antigua Aviación (hoy colonia Modelo), Villa de Seris y la Unidad Reforma.

 

Serio, el señor Campillo hizo un brindis: “Brindo por los Soles de Sonora, porque están haciendo historia. Es su primera temporada y ya están en la final de la liga más fuerte del mundo de futbol rápido e inventada por los gringos, a los cuales nos hemos enfrentado en rol regular y los hemos vencido”.

 

Chalío interrumpe: “Identidad, es la clave de este equipo, humildad y deseos de trascender, profesionales a tope y sobre todo amor por lo que hacen”.

 

El gran Pirraco conversa: “Un triunfador, es aquél que se levanta y busca las circunstancias que desea y si no las encuentra, las fabrica. Este pensamiento no es mío, sino de José Luis Treviño Ruiz, que junto con Luis Jaime Borrego Flores, han hecho de este equipo la identidad que mencionaron.

 

“La mejor afición es la de Hermosillo, porque siendo la primera temporada de un deporte nuevo fue el que metió más aficionados en su arena”.

 

Abicinio también comenta: “He escuchado de los Soles, que son más que un equipo de futbol rápido, son una familia, con talento sonorense y llegaron aquí para quedarse”.

 

Desde el bar Los Jarritos les hacemos una invitación para que este 15 de abril en el CUM apoyemos a los Soles de Sonora. ¡Vamos por el campeonato, Soles, vamos por la historia!

 

Así transcurrió esa tarde, entre bebidas, historia, comida y la charla más amena que no había tenido en años. A Dios gracias nunca te olvidaré.

 

El autor es ex jugador sonorense que militó en el futbol mexicano de la Primera División entre 1978 y 1992, con Coyotes Neza, Ángeles de Puebla, Puebla y Tigres. Jugó en la Selección Mexicana de futbol.

 

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