La judoca azteca inició su participación en la categoría -48 kilogramos ante la representante de Turquía Dilara Lokmanhekim, quien fue eliminada por la vía del Ippon. De esta manera, Castillo Torres accedió a los octavos de final.

El duelo decisivo para la tricolor fue ante la campeona mundial del 2014, la japonesa Ami Kondo, en donde perdió la medallista panamericana por la misma vía, luego de una amonestación que no esperaba.

“Lo que falla siempre es la cabeza, cualquier segundo de desconcentración o cualquier cosa que te saque de ahí. Me cayó una amonestación y cuando pasa eso tienes que cambiar la táctica, entonces me tenía que arriesgar y salí a marcar, al final no se pudo”, expresó la deportista.

Aunque no fue el resultado que esperaba, la campeona centroamericana de Mayagüez 2010, se mostró tranquila y demostró su satisfacción con su trabajo realizado en la máxima competencia deportiva.

“La verdad estoy muy contenta, venía a buscar el oro como todos, pero las cosas se dan como se tienen que dar, estoy muy feliz y entusiasmada por mi trabajo”, reveló.

Por último, confesó que por lo pronto piensa en unas vacaciones, para regresar al tatami y buscar su boleto para Tokio 2020, ya que quisiera estar en otra justa veraniega.