La situación de confinamiento en casa durante varios días puede causar mucho malestar psicológico; sin embargo, se han estudiado algunos factores de protección que nos ayuden a sobrellevar este momento, aquí haremos mención de ellos:

1) Evite la sobreinformación, ya que ésta puede generar mucha ansiedad, Para cuidarnos es importante, evitar lo mayor posible estar todo el día en redes sociales o en el televisor, escuchando noticias sobre el COVID-19.

Solo debemos informarnos en un momento concreto del día que hayamos elegido previamente, así como en un solo canal de información oficial. El resto debemos mantenernos ocupados en nuestras actividades cotidianas en casa: “Home office”, ejercitarse, etc.

2) Afrontamiento positivo, debemos centrarnos mentalmente no en que no nos dejen salir, sino en que, gracias al esfuerzo y sacrificio personal estamos colaborando haciendo un bien a nosotros mismos, a los demás y a nuestra sociedad.

Estamos haciendo algo esencial para el bien común. Hay que enfocarnos en que, aunque sea difícil, quedándonos en casa estamos salvando vidas. Este debe ser el pensamiento prevaleciente en todos.

3) Utilizar la tecnología para mantenernos comunicados con nuestros seres queridos y para seguir fomentando el trabajo y búsqueda de información que fortalezca nuestra preparación, a través de congresos, capacitaciones en línea etc.

4) Mantenerse activo, buscar actividades manuales y formas de pasar el tiempo separados de las pantallas, buscando formas de actividad física en casa. Planear una rutina diaria, diseñada previamente para nosotros mismos y cumplirla. Mantener un horario y una rutina es fundamental en el bienestar emocional.

5) Ayudarse mutuamente, colaborar y tomar conciencia de las dificultades que pueden suponer estos días a nivel psicológico. Hay que hacer acuerdos como equipos en casa, para ayudarse y colaborar unos con otros. Hay que pasar juntos estos días de la mejor manera posible.

6) Reconocer nuestras emociones diarias y/o el estado de ánimo. Es importante identificar nuestras emociones positivas y negativas diariamente. Es normal que en esta etapa reconozcas más fácilmente las emociones negativas, sin embargo, debemos tener la capacidad de poner un alto mental a esas emociones y evocar pensamientos positivos, recordando hechos que hayan sido plenos y satisfactorios en nuestra vida.

Así mismo plantear en vivir el presente y orientar el futuro que deseamos, hacia donde queremos ir, como queremos llegar. No hay que centrarse en todo lo malo que puede pasar, sino más bien en cómo poner soluciones a las situaciones que estamos viviendo.

Hay que prepararnos para el futuro que nos tocará vivir, esta situación pasará y regresaremos más fuertes para volver a empezar.

Gracias por su atención.

(*) La columnista es profesor investigador de la Universidad Estatal de Sonora en la Licenciatura en Entrenamiento Deportivo de la Unidad Académica Hermosillo.