Entonces José Luis tenía 18 años y era una de las grandes promesas del boxeo sonorense y mexicano, y tenía como figura a seguir a Julio César Chávez, a quien seguía en cada una de sus peleas y con el tiempo llegó a trabajar en su equipo como “sparring”.

{xtypo_quote_right} Claro que sí, lo recuerdo muy bien. Nos juntamos varios amigos para ver la pelea por televisión, fue muy emocionante, una gran pelea. Julio era, y es, mi ídolo, siempre lo he admirado mucho y fue muy motivante para mí ver ganar esa pelea, era como un ‘yo también quiero lograr algo así’.

Recuerdo que todos hablaban de la esa pelea, y Chávez le dio una cátedra para callarle la boca al ‘Macho’”, recordó entre risas vía telefónica desde Empalme, Sonora. {/xtypo_quote_right}

“Temible” Castillo reconoció siempre haber admirado a Chávez, con quien trabajó como su sparring entre 1998 y 2003, aproximadamente.

{xtypo_quote}“Tuve la oportunidad de trabajar en su equipo, y siempre le estaré muy agradecido por habérmela dado. Fui su sparring desde la que fue su segunda pelea ante Óscar de la Hoya (1998) durante cinco años. Le aprendí mucho y para mí fue muy importante, porque estaba con mi ídolo”, comentó.{/xtypo_quote}
Fue a principios de la década pasada en la que José Luis Castillo vivió su mejor momento deportivo, al coronarse dos veces campeón del mundo ligero del CMB y consolidándose como uno de los mejores boxeadores sonorenses de todos los tiempos.

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